¿Por Qué No Todo el Cacao Orgánico es Justo?

No compres cacao orgánico

El cacao orgánico ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente entre los consumidores conscientes de la salud y el medio ambiente. Sin embargo, cuando compras cacao orgánico, ¿realmente estás apoyando a los productores locales y sostenibles? En este artículo, exploraremos las diferencias entre el cacao orgánico y no orgánico desde la perspectiva de los productores locales, y por qué optar por cacao no certificado puede ser una decisión más justa y consciente.

El Proceso de Certificación Orgánica

Para que un productor de cacao pueda etiquetar su producto como “orgánico”, debe pasar por un proceso de certificación riguroso. En México, este proceso incluye una serie de pasos:

  1. Solicitar la certificación: El productor debe presentar una solicitud ante una entidad certificadora aprobada.
  2. Inspección: Una inspección inicial es realizada por un inspector autorizado para evaluar las prácticas agrícolas del productor.
  3. Cumplimiento de normas: El productor debe demostrar que cumple con todas las normas y regulaciones establecidas para la producción orgánica, incluyendo el uso de fertilizantes y pesticidas naturales, así como métodos de cultivo sostenibles.
  4. Pago de tarifas: Los costos de certificación pueden comenzar desde los 1000 USD, una cifra considerable para muchos productores locales.
  5. Renovación anual: La certificación no es permanente; debe ser renovada anualmente, lo cual implica inspecciones y tarifas recurrentes.

El Costo de Ser Orgánico

El costo de la certificación es uno de los mayores obstáculos para los productores locales. Para muchos, 1000 USD es una inversión significativa que no están dispuestos o no pueden hacer. Además, el proceso puede ser largo y burocrático, desviando tiempo y recursos que podrían ser mejor empleados en mejorar la calidad y producción del cacao.

Es importante destacar que el hecho de que un productor no tenga la certificación orgánica no significa que su cacao no sea orgánico. Muchos pequeños agricultores practican métodos de cultivo sostenibles y orgánicos, pero simplemente no pueden costear la certificación.

Apoyando a los Productores Locales

Cuando das preferencia al cacao orgánico certificado, estás favoreciendo a los productores que tienen el presupuesto y el tiempo para pasar por el proceso de certificación. Esto deja atrás a los productores locales dedicados que, aunque practiquen métodos orgánicos, no buscan o no pueden obtener el reconocimiento a nivel gubernamental.

¿Es justo esto? La respuesta podría no ser tan clara. Apoyar a los productores locales que se esfuerzan por cultivar cacao de alta calidad, sin importar si están certificados o no, puede ser una manera de promover la equidad y la sostenibilidad en la industria del cacao.

La Verdad Detrás del Cacao No Certificado

Es posible que muchas tiendas de chocolate, como la nuestra, utilicen cacao de productores locales que no están certificados pero que cultivan su cacao de manera orgánica. Al comprar nuestro chocolate, estás apoyando a estos agricultores que, a pesar de no tener una certificación oficial, producen cacao de alta calidad y respetuoso con el medio ambiente.

No Desalientes el Cacao Orgánico Certificado

Es importante aclarar que no estamos sugiriendo que dejes de comprar cacao orgánico certificado. Estos productos también tienen su mérito y, a menudo, cumplen con estándares rigurosos que garantizan prácticas agrícolas sostenibles. Sin embargo, te invitamos a considerar la historia y el esfuerzo detrás del cacao no certificado y a pensar en cómo tu elección de compra puede impactar a los pequeños productores locales.

Conclusión

La próxima vez que busques comprar chocolate, considera más allá de las etiquetas. Pregunta sobre el origen del cacao y los métodos de cultivo empleados. Al hacerlo, no solo disfrutas de un producto delicioso, sino que también apoyas a los agricultores locales que trabajan arduamente para ofrecerte lo mejor de sus cosechas. Comprar cacao no certificado no significa comprometer la calidad; significa dar una oportunidad a quienes realmente lo merecen.

Recuerda, lo justo es comprar de productores locales que se preocupan por el cacao y no buscan reconocimiento a nivel gubernamental. Así, estás haciendo una elección consciente y solidaria, apoyando a los verdaderos héroes detrás de cada grano de cacao.